El término
NEURODIVERSIDAD hace referencia a la variabilidad del funcionamiento
neurobiológico presente en la especie humana.
Las funciones
neurobiológicas, medidas a nivel conductual, neuropsicológico o
neurofisiológico, varían en la población debido a diferencias genéticas y a la
diversidad de ambientes en los cuales los genes se expresan (desde el nivel
celular al nivel cultural).
A lo largo de
cualquier continuo de esa neurodiversidad (por ejemplo los procesos
atencionales), hay variabilidad en la población, y los extremos (modos de
funcionamiento menos típicos) a menudo se asocian con discapacidad.
El concepto de
NEURODIVERSIDAD promueve la idea de que la diversidad en las características humanas
se extiendan al campo neurológico.
Cuando se pretende
que todas las personas se relacionen con su entorno de la misma manera,
entonces, en lo humano, construyo, con mi manera de mirar, seres adaptados y
limitados.
Respetar los
procesos de todas las personas implica, entre otras cosas, cambiar nuestra
manera de mirar, aceptar de manera
incondicional sus particularidades y adaptar el entorno para que todos y todas
puedan satisfacer sus verdaderas necesidades, en lo individual y en el
encuentro con el otro.